| DIC 252018 Recuerdo cuando niño la gran alegría con la que esperaba la llegada de las fiestas decembrinas, la ilusión del momento en la que mi mente soñaba con todos los regalos de navidad o la llegada de los reyes magos, épocas tan mágicas que mis papás se encargaron que así fuera aún a pesar de los juguetes que no llegaron la ilusión siguió de pie, el amor, la esperanza, la alegría, el buen ejemplo y la sana convivencia nunca faltaron, grandes ingredientes para comenzar a comprender desde muy pequeño el significado de vida que se conjuga con los sentimientos propios de estas fechas. No debemos de perder nunca estos sentimientos y reforzarlos aún siendo adultos Hay quienes priorizan su felicidad en lo que van a comprar refiriéndose a cuestiones materiales y que sin duda alguna compran felicidad temporal pero ¿realmente estamos fomentando los verdaderos valores que brindan la verdadera felicidad? aquí tampoco es una cuestión de no comprar sino de; no priorizar lo material sobre los valores humanos que brindan un significado a la existencia, es como decir si no compro no valgo y por lo tanto no soy feliz. Hoy y siempre hagamos de estas fiestas la ocasión especial para dar comienzo en que todos los días en nuestros hogares siempre exista amor, sana convivencia, respeto, humildad, esperanza, ilusión y el buen ejemplo, hagamos de nuestra familia una gran familia para que no dejemos de soñar y vivir por lo que realmente vale la pena. |