Desde que la tormenta tropical "Manuel" azotó las costas michoacanas y con ello provocó severas afectaciones en distintas comunidades, el Ejército Mexicano activó el Plan DN - III para apoyar a la población civil, en el establecimiento y administración de albergues, ayuda sanitaria y actividades de evacuación y alimentación.

Lo anterior ante las severas inundaciones registradas, así como los derrumbes de cerros, los desbordamientos de ríos, arroyos y presas, los deslaves en carreteras y las caídas de puentes vehiculares que impidieron la comunicación vía terrestre.

En Michoacán, dentro del Plan DN - III los soldados están dispersos principalmente en la región de Tierra Caliente y en la Costa.

En Huetamo hay presencia de efectivos de la 21 Zona Militar, quienes están en las localidades de San Jerónimo, Tziritzicuaro, Capeo y Arroyo Seco, donde hay al menos tres mil damnificados, pues en estos lugares se desbordó el Río Balsas y el agua alcanzó hasta los tres metros de altura (en algunos casos), inundando por completo viviendas y bodegas donde se almacenaba maíz.

Los elementos castrenses ayudaron a evacuar a los pobladores y en camionetas cargaron sus muebles y colchones, además de recordarles que no olvidaran llevarse consigo sus documentos personales.

Los soldados de la 21/a también están en el poblado de Zihuatzio, en Turicato, donde hay aproximadamente 60 familias afectadas y en Tacámbaro, donde varias carreteras resultaron dañadas.

Mientras que en la zona costera hay oficiales de la 43 Zona Militar, ellos están en Lázaro Cárdenas, Aquila, Coahuayana y Caleta de Campos.

Los militares participan dentro del Plan DN - III con secciones que van de los 30 a los 100 hombres, quienes emprenden acciones de evacuación, albergues, expansión de células de sanidad y de alimentación.