
SEP 282012 Los cadáveres semidesnudos de un profesor y un carnicero, mismo que presentaban varios impactos de balas, además de múltiples huellas de tortura, fueron encontrados en una zona deshabitada de la comunidad Puerto San Isidro, de Susupuato. El hallazgo ocurrió alrededor de las 17:30 horas del pasado jueves, justo a la altura de la brecha que conecta con el denominado Cerro de Guadalupe. De inmediato los oficiales ministeriales se constituyeron en el sitio para realizar las investigaciones del crimen. El primer occiso fue identificado por su esposa, respondía al nombre de Joaquín Solís Santoyo, de 42 años, originario del municipio de Juárez y radicado en la colonia Centro de Susupuato; a su cuerpo se le descubrieron dos lesiones de proyectiles de arma de fuego, una de ellas se le localizó en el tórax y la otra en el abdomen. Peritos criminalistas informaron que tenía las manos atadas con pedazos de lazo y se presume fue arrastrado, pues se le apreciaron algunas raspaduras en el rostro, así como en diferentes partes del cuerpo, mismo que únicamente portaba una playera. La conyugue del finado informó a la Policía que, Joaquín Solís laboraba como director de la Escuela Primaria, perteneciente a Copándaro y la última vez que lo vio con vida, salió de su vivienda cerca de las 07:30 horas del miércoles; la señora agregó que notó la ausencia al filo de las 17:00 horas y entonces lo comenzó a buscar hasta que le comunicaron el deceso de su pareja. La segunda víctima es Alfonso Aguilar Rodríguez, de 30 años, vecino del citado municipio donde ocurrió el hecho; los especialistas explicaron que tenía cuatro balazos en diferentes partes de su cuerpo y únicamente portaba un pantalón de mezclilla. Al difunto lo reconoció su padre, quien declaró que a las 14:00 horas del anterior miércoles, unos tipos enmascarados y armados llegaron a la carnicería donde Alfonso Aguilar trabajaba y se lo llevaron a la fuerza con rumbo desconocido. Un agente del Ministerio Público (MP) señaló que recolectaron 10 cartuchos percutidos del calibre 7.62, los cuales estaban tirados en el área donde los extintos fueron descubiertos. |