MAY 092013 Turícuaro, en el municipio de Nahuatzen parece ser una tierra de nadie, donde están "a sus anchas" más de 300 estudiantes normalistas y alumnas de las escuelas normales de Michoacán, donde mantienen retenidos a cinco policías, entre ministeriales y del Grupo de Operaciones Especiales (GOE), así como dos pipas de Pemex y cerca de 40 vehículos, propiedad de diversas empresas. En una entrevista anterior, otorgada a este medio de comunicación por Julio Hernández Granados, coordinador de Comunicación Social del Gobierno del Estado, el funcionario aseguró que la principal preocupación de los empresarios al invertir en Michoacán no es realmente el asunto relacionado con la delincuencia sino las constantes acciones radicales emprendidas si no por alumnos normalistas por maestros democráticos. Y cómo no creer esta postura, cuando los "manifestantes" toman rehenes y "secuestran" unidades repartidoras de productos varios, para así "negociar" con el ejecutivo del estado, en lo que más bien parece un cínico chantaje que sólo perjudica a la ciudadanía. Es así, que hasta el momento ninguna autoridad ha tratado de ingresar a la comunidad indígena de Turícuaro, para así rescatar a los uniformados Pedro Chamán Chamán, Hugo Salvador Alcaráz (de la Policía Ministerial), Jesús Rodríguez Pérez, Cristóbal Ruiz Sánchez y Demetrio Gómez Mata (del GOE), y tampoco para recuperar los automotores, lo cual ha dado confianza y hasta certeza a los normalistas de creer que tienen agarrado al "toro por los cuernos". La protesta de estos jóvenes, a pesar de lo que se diga, se basa únicamente en una cuestión: el otorgamiento de más de mil plazas automáticas para su movimiento. La imagen de Michoacán que a nivel nacional e incluso internacional ha tenido malos momentos, debido a las cuestiones relacionadas con la seguridad, ahora sufre otro golpe bajo con las constantes marchas, tomas, bloqueos, cierre de casetas de peaje y un sinnúmero de desmanes organizados por los normalistas o por los profesores del frente democrático del magisterio. Cabe mencionar que en medio de todo este panorama, aún continúa el proceso legal contra 49 normalistas, acusados por el robo de autobuses y motín, a raíz de los hechos violentos registrados en octubre del año pasado, que dejaron 176 estudiantes detenidos, 21 autobuses y vehículos oficiales calcinados y un sinnúmero de policías y alumnos heridos. |
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