OCT 312020 En un viaje realizado con estricto apego a las medidas sanitarias establecidas por el sector salud, las madres y padres de familia, recorrieron en autobús más de 280 kilómetros de Arteaga al Aeropuerto Francisco J. Múgica, de Morelia, para abordar el avión que los trasladó a California, donde por fin cristalizaron el sueño de reencontrarse con sus hijas e hijos, después de 10, 15, 20 y hasta 30 años sin verlos. Ni el cansancio, ni el padecimiento de algunas enfermedades, fueron obstáculo para que desbordaran sus emociones y entre lágrimas, risas, flores y regalos, se registrara ese encuentro que en ocasiones parecía imposible. No hubo un evento masivo, actividades culturales ni el mariachi que tradicionalmente acompañaba estos encuentros, pero sí el desbordamiento de emociones de esos michoacanos que no olvidan sus raíces y que ahora, al estar frente a frente, pudieron completar frases que quedaron inconclusas y darse todo el amor que guardaron por años. Acompañados por personal de la Secretaría del Migrante (Semigrante) y del ayuntamiento, hijas, hijos, nietas, nietos, bisnietas y bisnietos, en un espacio abierto y respetando la sana distancia, se reencontraron o, en la mayoría de los casos, se vieron por primera vez en persona, en un acontecimiento que, sin duda, marcará su vida para siempre. |
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